febrero 18, 2006

Preparan tierra para reforestar bosque El Nixticuil

Tres mil árboles serán plantados en el área que deforestó una constructora para construir casas para afectados de Nextipac.

Es el tercer día de obras en el bosque El Nixticuil. Cinco obreros trabajan seis horas diarias para rellenar zanjas, aplanar el suelo y preparar la tierra que reforestarán con tres mil árboles. Así se confirma que el Ayuntamiento de Zapopan dio marcha atrás en la urbanización de una zona para construir viviendas, un asilo, una capilla, un convento y un albergue para niños abandonados.

Son cinco hectáreas de la colonia El Tigre II. Ahí, el ayuntamiento deforestó 300 árboles para edificar los pies de casa donde vivirían los afectados por las grietas que se abrieron en Nextipac.
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El miércoles pasado, por la mañana, Vicente Munguía trabajador del área de Desarrollo Agropecuario, llegó con la orden de rehabilitar alrededor de dos hectáreas. Se encontró con un campo deforestado, de tierra parda y compacta, sin sombras y de zanjas desgastadas por las lluvias. Estaban escarbadas dos calles, una entrada y uno que otro hoyo sin sentido aparente.

Las obras empezaron por nivelar el suelo; como la excavación que mide 130 metros de largo, por doce de ancho y 90 de fondo. El problema se solucionaría en tres días de no ser porque necesitan llevar los dos camiones de carga a servicio mecánico. La fecha para concluir los trabajos de restauración dependerá de la disposición de la maquinaria.

El siguiente paso es preparar el campo con una capa de tierra fértil que traerán del bosque El Centinela, luego cavarán tres mil hoyos para reforestar con encinos de cuatro años de edad y pinos michoacanos de 1.5 metros de altura.
Que sean tres mil árboles no es una casualidad. El año pasado, los vecinos de la colonia El Tigre II se opusieron a las obras por el daño ambiental que provocarían. Entonces la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente abrió un expediente después de la denuncia de los colonos, por la tala de árboles de parte de la constructora. La Dirección de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Zapopan sancionó a la compañía y su castigo fue plantar diez árboles por cada roble que podó si autorización del municipio.
Jesús Palacios es vecino del fraccionamiento El Tigre II, su familia y otras 19 fueron quienes se opusieron a la decisión de construir en el territorio del bosque. Hicieron público su reclamo y ganaron. Ahora, Carlos Javier de Alba, el director de Ecología de Zapopan, les pidió hacerse cargo de regar dos días
a la semana el futuro campo, al menos, hasta que comience la temporada de lluvias.

Publicado por el grupo Milenio / 20-enero-06