febrero 26, 2006

Zapopan desinforma sobre El Nixticuil

La información que maneja Zapopan sobre el bosque El Nixticuil no se apega mucho a la realidad. En un comunicado en el que se responde a la presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca en el Senado, Verónica Velasco Rodríguez, el Ayuntamiento asegura que en el lugar se talaron únicamente 32 árboles “de forma unilateral por la constructora”. La versión, que va firmada por el alcalde interino de Zapopan, Ismael Orozco Loreto, es diferente a la que en su momento dio el director de Ecología del municipio, Javier de Alba Góngora, quien reconoció que alrededor de 300 árboles habían sido eliminados de la zona, unos talados y otros retirados, y que la mitad de ellos no sobrevivirían a un trasplante.

El escrito fue enviado al Senado el pasado 26 de enero de este año, como respuesta a las dudas de la senadora, turnadas al municipio zapopano desde julio de 2005.

Otra de las aseveraciones que Orozco Loreto hace en el comunicado dirigido al Senado es que las obras públicas que se intentaron realizar en el bosque El Nixticuil son procedimientos del gobierno del estado. Es decir, las viviendas que se pretendían construir en el bosque para los afectados de la comunidad de Nextipac son responsabilidad del Ejecutivo estatal. Sin embargo, olvidó señalar que al Ayuntamiento de Zapopan le correspondió la donación del predio para la construcción de los 250 pies de casa, obra que se suspendió desde hace más de un año.

Y aunque Orozco Loreto asume que se entabló un diálogo con los vecinos y después se ordenó la suspensión de las obras, la realidad es que fue un grupo de colonos quienes con manifestaciones, enfrentamientos con la autoridad municipal y organizándose en un comité, lograron la detención de las obras, aunque el daño ecológico ya era una realidad.

Pero también hay información correcta en el comunicado, como el anuncio del estudio que realiza la Universidad de Guadalajara en vías de declarar a El Nixticuil como zona protegida, trabajo que apenas lleva 20 por ciento de avance y que comenzó a mediados del año pasado.


Publicado el 26 de febrero por Público Milenio/Dolores Reséndiz Mora/Guadalajara

febrero 18, 2006

Ayuntamiento descarta intención de romper compromisos en El Nixticuil

Aunque el acuerdo para no construir viviendas en el bosque es verbal, el director de Obras Públicas aclaró que esta vigente.

Defensores de El Nixticuil quieren que el gobierno de Zapopan se comprometa a no afectar este bosque.

El director de Obras Públicas del Ayuntamiento de Zapopan, Ignacio Vázquez Ceceña, reconoció que la construcción en el bosque El Nixticuil, en la colonia El Tigre II, únicamente está impedida por un acuerdo verbal de la autoridad municipal. Sin embargo, aclaró que el compromiso está vigente y descartó la intención de permitir edificaciones en la zona.

Aunque en septiembre del año pasado, el Ayuntamiento de Zapopan aprobó la donación de seis hectáreas del bosque a la Asociación Villa de los Niños para la construcción de un asilo, una clínica y un templo; Vázquez Ceceña aclaró que a la dependencia a su cargo no han acudido a tramitar la licencia para urbanizar y llevar a cabo el núcleo de asistencia social. Desconoce los motivos, pero asegura que no hay trámites en pie para la construcción.

Los temores de los vecinos sobre un posible rompimiento en el acuerdo verbal están fundados en la vista de un plano que corresponde al Plan Municipal de Desarrollo 2006. Ahí, los lugareños encontraron que existe un fraccionamiento planeado en el área boscosa. Sin embargo, el director de Obras Públicas aclaró ayer que fue una confusión y que olvidaron retirar del plano el área en el que se tenía prevista la construcción de los pies de casa para los habitantes de Nextipac, afectados por las grietas de junio de 2004.

“Es que se fue la retícula de la construcción de casas para los de Nextipac. Eso ya se modificó, ya se acordó que se harán en otro terreno, aunque aún no se sabe en cuál”, apuntó Vázquez Ceceña.

Mientras la Universidad de Guadalajara concluye el estudio para determinar si el bosque El Nixticuil debe considerarse como un área protegida e impedirse la construcción de viviendas, el funcionario municipal aclaró que no hay intención de romper el compromiso que asumió el alcalde con licencia de Zapopan, Arturo Zamora Jiménez, en octubre del año pasado.

“No, bueno, si en eso quedaron, pues así se hace. Aquí no hemos dado un permiso para construir en el bosque”, sostuvo el titular de Obras Públicas.



Publicado por Grupo Milenio / 8-enero-06 / Dolores Reséndiz Mora / Foto: Humberto Muñiz

Harán una reserva federal de 30 mil ha en la barranca

Zapopan y San Cristóbal, con apoyo federal, declararán este año el área natural protegida más importante en Jalisco.

La barranca del río Santiago, uno de los sitios con mayor diversidad biológica en la región conurbada de Guadalajara, contará este año con una declaratoria de reserva federal que amparará una superficie similar a la del bosque La Primavera, sobre los municipios de Zapopan y San Cristóbal.

De concretarse el proyecto, en las inmediaciones de la segunda zona metropolitana del país nacerá una segunda gran área natural protegida, en un proyecto que ha contado con participación apenas marginal del gobierno del estado. Es básicamente una iniciativa municipal apoyada por el gobierno federal.

Actualmente, los ayuntamientos involucrados y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) trabajan la propuesta, con énfasis en sostener la generación de agua y sus ecosistemas diversos, que van de las selvas secas a los bosques de pino y encino.

Martín del la Rosa Campos, director de Protección al Medio Ambiente zapopano, explica que se busca la categoría de “área de protección de recursos naturales”, debido a que dicha categoría permite mantener actividades productivas de forma sustentada y generar procesos de conservación.

La superficie a proteger rebasa 30 mil hectáreas. Zapopan aportará 17,727 hectáreas que actualmente tienen la categoría de “área de protección hidrológica” en el ámbito jurídico estatal. San Cristóbal tiene en su demarcación otras 12,500 hectáreas con que se cerraría el polígono. El gran total, aún preliminar, es 30,227 ha, contra 30,500 ha de La Primavera.

Colateralmente, hay en Zapopan un segundo proyecto de protección, aunque en categoría de “parque ecológico”: se trata de la reserva de El Nixticuil, que sumada a los ecosistemas de la zona de El Diente —actualmente sometidos a caótica visita pública— y los bosques de encino de la comunidad indígena de San Esteban, alcanzan casi 400 hectáreas. De la Rosa Campos espera que esta reserva se una por corredores bien preservados con la gran área natural de la barranca.

El plazo final para lograr los dos proyectos se cumple dentro de 2006.

Protección más eficiente

Para Raquel Gutiérrez Nájera, directora del Instituto de Derecho Ambiental (Idea) y consultora en el proyecto, un decreto federal es la única manera de proteger eficazmente recursos valiosos. “La idea es ir tan lejos como se pueda, y amparar en una sola declaratoria toda la zona; por eso pretendemos que se extienda la gestión con el municipio de Ixtlahuacán del Río, que tiene la parte norte de la barranca; también creemos que este manejo se debe dar en la zona de Arcediano, pero el gobierno del estado, por su proyecto de la presa, se opone a crear el corredor natural de la barranca”, indica la doctora en derecho.

A su juicio, la categoría de “área de protección de recursos naturales” es adecuada porque permite preservar y restaurar los ecosistemas y conseguir apoyos para proyectos en muchas zonas. “Un parque ecológico estatal, como el que propone el estado en Arcediano, es para preservar valores escénicos, pero no es esa toda la riqueza de la barranca; hay mucha diversidad por proteger y que mejor que con decreto federal”.

El artículo 53 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente señala que “Las áreas de protección de recursos naturales, son aquellas destinadas a la preservación y protección del suelo, las cuencas hidrográficas, las aguas y en general los recursos naturales localizados en terrenos forestales de aptitud preferentemente forestal […] se consideran dentro de esta categoría las reservas y zonas forestales, las zonas de protección de ríos, lagos, lagunas, manantiales y demás cuerpos considerados aguas nacionales, particularmente cuando éstos se destinen al abastecimiento de agua [...]”.

Agrega: “sólo podrán realizarse actividades relacionadas con la preservación, protección y aprovechamiento sustentable de los recursos naturales en ellas comprendidos, así como con la investigación, recreación, turismo y educación ecológica, de conformidad con lo que disponga el decreto que las establezca, el programa de manejo respectivo y las demás disposiciones jurídicas aplicables”, concluye el artículo referido.

Los valores

De la Rosa Campos advierte que no se parte de cero. Desde 1998, el Ayuntamiento de Zapopan comenzó los estudios y trabajos entre la población para proteger la zona. En mayo de 2005, el Congreso del estado publicó la declaratoria de “área de protección hidrológica” para las 17,729 hectáreas del lado de Zapopan, las cuales están repartidas en dos grandes polígonos: el primero al noroeste del municipio, con 8,866 hectáreas, colinda al norte con el vaso de la presa de Santa Rosa y el mismo río. El segundo tiene 9,063.7 hectáreas y comienza al norte de la zona metropolitana de Guadalajara, por toda la parte oeste del río hasta su colindancia con San Cristóbal de la Barranca.

Es una zona intensamente estudiada, lo cual es base para realizar muestreos y trabajos de inventarios en la zona de San Cristóbal, que une a ambos polígonos y crea de este modo un solo corredor.

“La señora presidenta de allí, Eliazer Rodríguez Castro, nos ha expresado todo su interés en el proyecto, pero ellos no tienen dinero; entonces aquí entra el trabajo de la Conanp y la ventaja de que la zona ya fue estudiada tiempo atrás”, añade el director de Medio Ambiente.

Así, ocho años de trabajo en el área han rendido frutos: se tiene el consenso entre los pobladores de que es ventajoso tener un área protegida, y se han frenado algunos procesos de deterioro. Por ejemplo, la siembre de agave, que es altamente erosiva. En cambio, el problema capital para estas comunidades, la contaminación del río Santiago por los drenajes de Guadalajara, sigue pendiente de cumplirse.

En la futura reserva existe un desnivel de 757 metros. Desde 1,580 metros sobre el nivel del mar, en la colindancia de Zapopan y Guadalajara, hasta 823 msnm en la colindancia con San Cristóbal de la Barranca. Hay unas diez comunidades bióticas arropadas en esa variación. Se han identificado alrededor de 900 especies de flora y 140 de fauna silvestre.


Publicado por Grupo Milenio / Lunes 6 de Febrero.

Que nos tomen en cuenta, piden en El Tigre II

Los vecinos de El Tigre II reclaman que se respete la idea original de hacer una reserva ecológica.

Los vecinos de El Tigre II, quienes propusieron la creación de un área natural protegida en el bosque El Nixticuil, reclaman que se respete la idea original de hacer una reserva ecológica, por tratarse de un bosque nativo, y de ningún modo crear un parque en la zona, que podría ser sometido a obras que pusieran en peligro su integridad.

En una carta entregada a este diario, a raíz de la publicación sobre la nueva reserva de 400 hectáreas que trabajan el Ayuntamiento de Zapopan y el Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, los miembros del comité promotor Salva Bosque Tigre II señalaron “algunas incongruencias informativas” del director zapopano de Medio Ambiente, Martín de la Rosa Campos, y la regidora Maricarmen Acosta.

“Los vecinos de El Nixticuil no entendemos que por un lado el ayuntamiento prometió un estudio de impacto ambiental, donde se reconozca a El Nixticuil como área natural protegida; además de que existe el precedente de la declaratoria de la Semarnat, en donde se le señala como bosque nativo. Por otro lado, se pretende llevar a cabo un proyecto donde se declare como parque suburbano, cuando algunos investigadores que llevan a cabo el estudio han registrado especies endémicas en la región en peligro de extinción”.

“Queremos recordar que éste es un bosque natural, que no admitiría un manejo como parque suburbano. También, que nos sorprende que se le señale a la regidora Maricarmen Acosta como firme promotora de los esfuerzos por la conservación de El Nixticuil, ya que su participación ha sido sólo bajo presión de los vecinos”.

Además, “seguimos esperando los 2,900 árboles prometidos por el Ayuntamiento de Zapopan, para reforestar la zona devastada, ya que solamente fueron trasplantados menos de cien hasta el momento”.

MILENIO 11-febrero-06

En un año, la ZMG podría convertirse en “ciudad verde”


Además de la zona federal, se debe definir pronto el parque ecológico de Arcediano, requisito antes de hacer la presa.

La capital de Jalisco, una ciudad deficitaria tanto en áreas verdes urbanas como en reservas ecológicas contiguas, podría contar en menos de un año a tres grandes áreas naturales protegidas con una superficie conjunta de 70 mil hectáreas, lo que la convertiría en la zona metropolitana mejor arropada del país en ese tema.

En buena medida a contrapelo de la política del gobierno del estado, de no dar prioridad a los temas ambientales, se ha establecido una agenda alterna con la activa participación de los ayuntamientos metropolitanos, las instituciones académicas privadas y públicas (UdeG), los organismos no gubernamentales y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), que empujan los proyectos de la reserva federal del río Santiago, sobre más de 30 mil hectáreas, así como el parque ecológico de El Nixticuil, con 400 ha.

Del lado del gobierno estatal, su Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) tiene como tarea promover el parque ecológico estatal de Arcediano, en torno a la presa que se pretende construir en la misma zona. La creación de dicha reserva fue exigida por la secretaría federal (Semarnat) para permitir el levantamiento de la cortina sobre el río Santiago, con la cual se pretende abastecer de agua potable a la ZMG.

No hay todavía un proyecto definido en Arcediano, porque mientras el Ejecutivo mantiene su postura de no dar un metro más de área protegida que la condicionada por la Semarnat, los ambientalistas y académicos que han sido invitados al proyecto han pedido aprovechar la inercia y extender el parque sobre unas 23 mil hectáreas. “La idea es proteger al máximo la cuenca baja, sería magnífico para la ciudad”, señaló a Público un consultor participante.

Otra posibilidad para Arcediano es retomar los viejos decretos de área de protección hidrológica para las cuencas de los ríos Santiago y Verde, tributarios del embalse artificial. Sin embargo, esta iniciativa, aún más ambiciosa, fue frenada por los responsables del gobierno.

Raquel Gutiérrez Nájera, consultora del proyecto de la reserva federal en el Santiago, señala que sería fundamental extender con una declaratoria similar toda la barranca, pero es difícil porque el proyecto de Arcediano se está manejando muy al margen de los otros.

En el escenario ideal, que sería crear la área nacional protegida (ANP) de 23 mil ha en Arcediano (casi descartada), las más de 30 mil ha de la reserva del Santiago (Zapopan-San Cristóbal de la Barranca) y las 30,500 ha decretadas desde 1980 en La Primavera, Guadalajara contaría con más de 80 mil ha protegidas en menos de un año. Mientras en la reserva del Santiago hay un trabajo sistemático ya encaminado, en el caso de Arcediano, la urgencia por arrancar la presa obligaría a contar primero con la reserva ecológica en el lugar.



Dadas esas circunstancias, no es descabellado pensar los proyectos madurados en decreto en un plazo corto.


El Nixticuil


El caso de las áreas verdes al interior de la mancha urbana, el déficit es elevado; el promedio por habitante en el municipio principal, Guadalajara, se acerca apenas a 4.5 metros cuadrados por morador, lo que arroja un faltante de 6.5 metros cuadrados, según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La solución con que se ha afrontado ha sido crear plazas y jardines en el interior, pero con un gran eje de grandes parques públicos con superficies que van de cinco a 112 hectáreas (ver gráfico anexo). Hay además parques suburbanos, que funcionan como transición entre la ciudad y las áreas agrícolas. Éste será el caso de la nueva reserva El Nixticuil-El Diente-San Esteban, situado en el norte metropolitano, cuyo proyecto se concluirá en un mes con base en trabajos desarrollados por la UdeG. La idea nació de la regidora de Zapopan Maricarmen Acosta, la cual ha apoyado firmemente todos los esfuerzos de conservación, subraya el director zapopano de Medio Ambiente Martín de la Rosa Campos.

En el pasado, parques suburbanos fueron el Metropolitano, La Solidaridad y Colomos, pero fueron absorbidos por el crecimiento metropolitano. Uno de los problemas a enfrentar en El Nixticuil es precisamente el crecimiento de la plusvalía en los terrenos anexos al parque, lo que podría desatar la especulación urbana y presionar la misma zona natural.

Un proyecto frustrado

En el año 1994, la Administración estatal de Carlos Rivera Aceves y el gobierno municipal de Eduardo Riverón Gámez en Tlaquepaque, dieron a conocer el comienzo de las reforestaciones y la adquisición de predios en la parte alta del cerro del Cuatro, para constituir allí un gran parque metropolitano, cercano a 500 hectáreas, que permitiría amortiguar el problema ambiental serio que se vivía desde tiempo atrás en la zona.

De hecho, la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur), que encabezaba Jaime Ramírez Cornejo, comenzó con el municipio un proyecto de reforestación sobre medio centenar de hectáreas. A la salida de estas administraciones de origen priista no se retomó el asunto. Peor aún: la gestión del panista Antonio Álvarez, en Tlaquepaque, permitió la autorización de nuevos fraccionamientos en el área, hasta sobre 200 hectáreas.

El resultado es que en la actualidad hay un problema urbano mayúsculo en el cerro del Cuatro. Y la mayor altura de la ciudad se mantiene deforestada, llena de antenas de telecomunicación que terminan de afearla.

Publicado por el Grupo Milenio / 7-febrero-06

Preparan tierra para reforestar bosque El Nixticuil

Tres mil árboles serán plantados en el área que deforestó una constructora para construir casas para afectados de Nextipac.

Es el tercer día de obras en el bosque El Nixticuil. Cinco obreros trabajan seis horas diarias para rellenar zanjas, aplanar el suelo y preparar la tierra que reforestarán con tres mil árboles. Así se confirma que el Ayuntamiento de Zapopan dio marcha atrás en la urbanización de una zona para construir viviendas, un asilo, una capilla, un convento y un albergue para niños abandonados.

Son cinco hectáreas de la colonia El Tigre II. Ahí, el ayuntamiento deforestó 300 árboles para edificar los pies de casa donde vivirían los afectados por las grietas que se abrieron en Nextipac.
+
El miércoles pasado, por la mañana, Vicente Munguía trabajador del área de Desarrollo Agropecuario, llegó con la orden de rehabilitar alrededor de dos hectáreas. Se encontró con un campo deforestado, de tierra parda y compacta, sin sombras y de zanjas desgastadas por las lluvias. Estaban escarbadas dos calles, una entrada y uno que otro hoyo sin sentido aparente.

Las obras empezaron por nivelar el suelo; como la excavación que mide 130 metros de largo, por doce de ancho y 90 de fondo. El problema se solucionaría en tres días de no ser porque necesitan llevar los dos camiones de carga a servicio mecánico. La fecha para concluir los trabajos de restauración dependerá de la disposición de la maquinaria.

El siguiente paso es preparar el campo con una capa de tierra fértil que traerán del bosque El Centinela, luego cavarán tres mil hoyos para reforestar con encinos de cuatro años de edad y pinos michoacanos de 1.5 metros de altura.
Que sean tres mil árboles no es una casualidad. El año pasado, los vecinos de la colonia El Tigre II se opusieron a las obras por el daño ambiental que provocarían. Entonces la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente abrió un expediente después de la denuncia de los colonos, por la tala de árboles de parte de la constructora. La Dirección de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Zapopan sancionó a la compañía y su castigo fue plantar diez árboles por cada roble que podó si autorización del municipio.
Jesús Palacios es vecino del fraccionamiento El Tigre II, su familia y otras 19 fueron quienes se opusieron a la decisión de construir en el territorio del bosque. Hicieron público su reclamo y ganaron. Ahora, Carlos Javier de Alba, el director de Ecología de Zapopan, les pidió hacerse cargo de regar dos días
a la semana el futuro campo, al menos, hasta que comience la temporada de lluvias.

Publicado por el grupo Milenio / 20-enero-06

Ganan los vecinos: ya no habrá obras en El Nixticuil

Vecinos de El Tigre II consiguieron un acuerdo con las autoridades zapopanas y del estado.

Aunque las obras se detuvieron, alcanzaron a dejar un daño irreparable: 300 robles del bosque El Nixticuil se perdieron totalmente.

El gobierno estatal y el Ayuntamiento de Zapopan acordaron detener las obras que se realizaban en el bosque El Nixticuil, en la colonia El Tigre II. Los 250 pies de casa que servirían de vivienda a los afectados de Nextipac no serán edificados en el lugar, y el asilo, cuyo predio ya había sido incluso bendecido, estará suspendido de forma indefinida. Aunque el daño es evidente y su reparación no se ve cercana: alrededor de 300 robles que habitaban en la zona boscosa perdieron la vida, bajo el poder de las máquinas contratadas por la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur).

El lunes pasado, vecinos de El Tigre II y de Nextipac se manifestaron en el exterior de la Presidencia Municipal, después de caminar desde la gasolinera del cruce de las avenidas Tesistán y Ángel Leaño. Su intención era ser escuchados por el presidente municipal, Arturo Zamora Jiménez, quien durante el transcurso de la manifestación no los recibió. Sin embargo, los inconformes consiguieron una cita el mismo día a las 20:00 horas, incluida la presencia del titular de la Sedeur, Claudio Sáinz David.

“Quedamos con el alcalde y con el director que las obras quedan suspendidas por tiempo indefinido, y tendremos otras dos pláticas: el lunes y el viernes, entre las tres partes”, apuntó uno de los representantes vecinales, Jesús Palacios.

La versión fue confirmada por el alcalde, quien añadió que existen dos propuestas para reubicar a los habitantes de Nextipac, aunque se negó a dar los nombres de los terrenos o de las zonas.

“Todavía no lo tenemos fijado, y ha sido una práctica que adelantemos [la información] y que luego las cosas no se resuelvan bien; preferimos mejor tratar el acuerdo con los vecinos. Hasta que tomemos una decisión se los anunciaremos con mucho gusto. Uno está muy cercano a la zona de Nextipac, y el otro estamos explorando en qué zona sería. Pero hasta ahorita, como no hay una decisión, pues no tiene caso especular”, señaló Zamora Jiménez.

Ahora sí, la decisión confirma lo que la ley señala: el bosque es una zona de reserva en la que no se pueden hacer construcciones de considerable densidad.

Los vecinos pidieron al ayuntamiento que se declare área natural protegida a la superficie del bosque que corresponde al municipio con las características de parque municipal. El ayuntamiento aceptó el compromiso.

En la reunión del pasado lunes, los vecinos de El Tigre II pidieron la no intervención del coordinador de asesores de la presidencia, José Luis Cuéllar Garza, a quien acusan de desvirtuar la información. “Él solamente ha ido a confundir a la colonia. Les prometió recursos a los que no tienen, queriendo con eso convencerlos también de la construcción dentro del bosque”, señaló Jesús Palacios.

Ayer, José Luis Cuéllar Garza también confirmó que el proyecto está detenido. Según la explicación que envió el funcionario con el área de Comunicación Social, la construcción del asilo y las viviendas para los habitantes de Nextipac es un proyecto integral.

Sin embargo, el ayuntamiento nunca dio a conocer que se tratara de un proyecto integral. De hecho, ambas construcciones se autorizaron en fechas diferentes.

El alcalde no se hace responsable

El alcalde de Zapopan, Arturo Zamora Jiménez, se deslindó del daño en el bosque El Nixticuil, a pesar de que fue la Administración a su cargo la que autorizó la entrega de cinco hectáreas de la zona arbolada. Además, el primer edil zapopano se negó a responder por qué autorizaron la donación del terreno.

“Pues la verdad es que nosotros no tenemos en este momento ninguna prisa, ni por continuar ni por descontinuar”, señaló el primer edil zapopano.

Al alcalde se le preguntó sobre la detención de las obras del asilo, lugar que el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, bendijo el pasado 12 de septiembre en el bosque El Nixticuil. Zamora Jiménez estuvo presente en la bendición y avaló la obra en el predio, entregado en comodato también por su Administración.

“Pues no sé si hay obra, sería cuestión de que se dieran una vuelta”, apuntó el primer edil, quien dijo además que intentó ayudar a los habitantes de Nextipac, afectados por las grietas del año pasado, con la entrega del terreno.

La villa de los niños, en suspenso

El trámite para autorizar el comodato del predio para la construcción del asilo de ancianos en el bosque del Nixticuil fue ágil y, el mismo día que se aprobó, el cardenal y las autoridades municipales acudieron a la bendición.

El proyecto, promovido por el empresario Julio García Briseño, fue presentado al municipio el 17 de marzo de 2005. El ayuntamiento autorizó entregar “cuatro o cinco hectáreas”, que al final se convirtieron en seis, de una zona marcada por los planes parciales de desarrollo como área para espacios verdes y abiertos.

La asociación Villa de los Niños, que también cuenta con un inmueble para niños abandonados en el municipio de Acatlán de Juárez, apuró la aprobación para que los recursos no se fueran a Nicaragua o algún otro país, como ya se tenía previsto.

Sin embargo, los vecinos de lograron la suspensión de las obras junto con las de las viviendas de los damnificados de Nextipac, donde el año pasado se abrieron varias grietas en el terreno y, además, están en la búsqueda de que el municipio realice los trabajos para llevar servicios públicos a una de las zonas de la colonia El Tigre II.

Publicado por Grupo Milenio /14-octubre-05 / Dolores Reséndiz Mora, Guadalajara

El bosque no es negociable...

El pasado domingo 7 de agosto, en la Av. Prolongación Dr. Ángel Leaño y Calle D, se llevó a cabo una asamblea entre el Ayuntamiento de Zapopan y los colonos de la Colonia El Tigre II, debido a que algunos vecinos del bosque que lleva el mis?mo nombre, se han quejado por irregularidades e invasiones. En la junta se trataron temas como: La regularización de la colonia, el informe financiero y asuntos varios; pero a los miembros del Comité de Defensa del Bosque no les pareció que el ayuntamiento zapopano hiciera caso respecto a la problemática que presenta el Bosque de Nixticuil, por lo que el Sr. Jesús Palacios, colono de El Tigre II, señaló: «Nosotros ya llevamos dos meses y tres días luchando día tras día para salvar el bosque; hemos tenido muchas reuniones en la colonia con regidores, hemos acudido al Congreso del Estado y enviado cartas a diferentes instancias...».


Regularización

A decir del Ayuntamiento de Zapopan, se le llama «asentamiento irregular» a aquél que no cumple con la normatividad vigente en su momento y es necesaria la regularización, para que a esa colonia se le incluya en el inventario municipal con el fin de que pueda gozar de certeza jurídica, permiso de obra, nomenclatura, etcétera. A este respecto, el representante del ayuntamiento zapopano, dijo: «Estamos reunidos para informarles que el avance de la regularización ha sido del 80 por ciento; el resto se completará con el convenio y la ratificación de planos... La asociación vecinal, desde 1997, ha solicitado la regularización, y en administraciones pasadas se ha llegado a acuerdos, pero lo que se pretende es culminar el proceso, darles la certeza jurídica y llevar en forma progresiva los servicios básico; pero es sobre acuerdo de voluntades y a petición de ustedes...». A continuación, los colonos del Tigre II hicieron varias preguntas sobre este tema para aclarar dudas. Después se dio lectura al informe financiero en el que se detalló en qué se ha empleado el dinero aportado por los colonos para beneficio de su colonia.


El bosque

El Bosque de El Nixticuil se localiza entre las colonias: Ángel Leaño, Río Blanco, Colonos de Tesistán, El Tigre II, Arcos de Zapopan y Nuevo México, por lo que se ha visto afectado por constantes incendios, deforestación clandestina, desechos y basura en su suelo con un alto riesgo para la flora y fauna del mismo. La importancia del Bosque de El Nixticuil radica, además, de ser un pulmón para los habitantes de la Zona Metropolitana, en las actividades que se realizan al interior del bosque: Deportivas, recreativas, educativas, sociales, etcétera.
El Sr. Salvador Rivera, vecino de El Tigre II dijo: «Pretenden meter un colector para empezar con 1,800 casas a cambio de servicios públicos, escrituras… Nosotros no podemos negociar el bosque».
El Ayuntamiento de Zapopan mostró planos para que los colonos se dieran cuenta de qué es lo que se pretende construir, y afirmaron: «Se cortarán los menos árboles posibles».
Durante la asamblea se repartieron volantes en los que se leía: «El pasado 18 de mayo, autoridades de Zapopan y del Gobierno del Estado, sin autorización de la SEMARNAT y sin tomar en cuenta el sentir de los vecinos, llegaron a la colonia El Tigre II, en la madrugada, y con maquinaria pesada talaron de manera brutal más de 300 árboles del bosque nativo de roble… Que quede claro: No queremos cambiar el bosque por servicios públicos».


Testimonios

Jesús Palacios,
48 años. Comité Salvabosque El Tigre II
«El bosque es un ‘pastel’ delicioso para los inversionistas… Mañosamente quieren trasladar a los afectados por las grietas de Nextipac, para entrar con el colector… Queremos salvar al bosque de Nixticuil».


Salvador Rivera,
39 años. Comité Salvabosque El Tigre II
«No queremos que destruyan el bosque; es de todos…».


Publicado en el Semanario Arquidiocesano de Guadalajara / Rosa Viridiana Flores Tlaque

En El Nixticuil no habrá ni obras ni casas: alcalde

No se va a construir ninguna obra pública en el bosque El Nixticuil, indicó Ismael Orozco Loreto.

Definitivamente no se va a construir ninguna obra pública en el bosque El Nixticuil, indicó el encargado de la alcaldía de Zapopan, Ismael Orozco Loreto. Entrevistado durante el recorrido que hizo por cuatro colonias al sur de Zapopan para presentar obra pública, en su mayoría en escuelas, aseguró que en los próximos días se anunciarán acciones como respuestas muy claras a la zona forestal, donde se planeó reubicar a las personas afectadas por las grietas de Nextipac.

Con respecto al temor de los vecinos del bosque de que se construyera un fraccionamiento en ese territorio, Orozco Loreto insistió que no habrá obra alguna de urbanización. Por ello, señaló que la propuesta del ayuntamiento para reubicar a los vecinos de Nextipac es Lomas de San Gonzalo, y destacó que, aunque hay desconocimiento entre los vecinos de que esta última área era un relleno sanitario, expresó: “Vamos a tratar de dar a conocer la situación real del terreno y buscar que esto se resuelva”.

Mientras el gobierno sostiene que no construirá nada en el bosque, los vecinos, inclusive, alegan que en el Plan Municipal para 2006 hay obras previstas.

Publicado en PÚBLICO MILENIO /Miércoles 18-enero

Sólo un acuerdo verbal protege el bosque El Nixticuil

Los vecinos temen que el alcalde sustituto, Ismael Orozco, viole el acuerdo con Arturo Zamora.

El bosque El Nixticuil, en Zapopan, está protegido por un acuerdo verbal, pero no existe hasta el momento una restricción que impida construcciones en el lugar. Aunque el suelo del bosque no está autorizado para la urbanización, en las 35 hectáreas de propiedad municipal, el Cabildo tiene la facultad de modificar los usos del suelo, si así lo decidiera.

La directora del Instituto de Derecho Ambiental (Idea), Raquel Gutiérrez Nájera, explicó que en la reunión de octubre del año pasado, el ahora alcalde con licencia, Arturo Zamora Jiménez, se comprometió a que no habría intención de urbanizar la zona hasta que no se concluyera el estudio encargado al instituto y a la Universidad de Guadalajara (UdeG). El estudio pretende declarar El Nixticuil como zona protegida.

“Pues el compromiso fue el de que no habría construcción, eso dijo quien era alcalde en ese momento y el que está ahorita pues yo creo que respetará ese compromiso”, aseguró este jueves la investigadora.

El estudio fue encargado el 15 de octubre de 2005 al Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA), trabajo en el que el Ayuntamiento de Zapopan invirtió un millón de pesos. En esa fecha, la directora del Idea ofreció tres meses como tiempo aproximado para concluir la investigación y, aunque dentro de unos días se cumplirá el plazo, la ambientalista no tiene aún los avances del estudio que realiza la UdeG.

Sin embargo, los vecinos ven amenazado el compromiso de conservar el bosque mientras concluye el estudio.

El 25 de diciembre pasado los vecinos de la colonia El Tigre II, enclavada en el bosque El Nixticuil, denunciaron la marca en algunos árboles con la intención de ser derribados por el ayuntamiento. “El Ayuntamiento de Zapopan ya autorizó la construcción de un fraccionamiento en la parte más alta del bosque”, señaló en aquella fecha una de las vecinas, Adriana Hernández, integrante también del Comité Salva El Bosque. Incluso, los vecinos aseguran que, en el Plan Municipal para el año 2006, el bosque tiene áreas previstas para convertirse en zonas construidas (Público, 26 de diciembre de 2005).

Ayer, la directora del Idea dijo que debe respetarse el compromiso verbal de no construirse, y añadió que la semana próxima los vecinos de El Tigre II se reunirán en las oficinas del instituto para analizar las formas legales de impedir el avance de construcciones.

Si el Ayuntamiento de Zapopan olvida el compromiso y cumple con lo que marca el Plan Municipal de Desarrollo 2006, estaría olvidando la palabra del alcalde de Zapopan con licencia, Arturo Zamora Jiménez, y la del gobierno estatal. Aunque la construcción de casas para los afectados de Nextipac ya había sido suspendida en El Nixticuil, la dependencia encargada de la obra, la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur) y el gobierno zapopano se comprometieron a la suspensión de obras. Incluso, el ayuntamiento propuso dos lugares diferentes al bosque para la construcción de pies de casa para los vecinos que viven en la zona de grietas en Nextipac.

El derribo de árboles y el Plan Municipal presentado a los vecinos de El Tigre pondrían en riesgo el compromiso verbal de la autoridad, único acuerdo para defender el bosque El Nixticuil.

Una historia de pugnas

Agosto de 2004
• Zapopan decidió que en El Tigre II se construyeran los pies de casa para los habitantes de Nextipac, afectados por las grietas de junio del mismo año

Febrero de 2005
• La Sedeur comenzó los pies de casa con el recurso federal previsto para los vecinos de Nextipac. La dependencia derribó 300 robles. Semanas después, los vecinos de la zona obligaron a la suspensión de obras. Fue el primer movimiento de colonos

Julio de 2005
• El director de Ecología, Carlos Javier de Alba, reconoció que más de la mitad de los 300 robles que se talaron en la zona habrían de morir. Ninguna dependencia de protección a la ecología se hizo cargo del asunto

Agosto de 2005
• La Dirección de Desarrollo Social de Zapopan informó que el recurso federal para los pies de casa estaba en riesgo, ante la negativa de los vecinos. El ayuntamiento continuaba con la postura de construir 140 pies de casa

Septiembre de 2005
• Zapopan aprobó la donación de seis hectáreas para la construcción de un asilo, una clínica y un templo en el bosque El Nixticuil. El cardenal tapatío, Juan Sandoval, bendijo el terreno. El municipio aprueba la modificación al uso de suelo para permitir la construcción en las hectáreas donadas

Octubre de 2005
• El municipio anuncia suspensión de cualquier obra y pide un estudio a la UdeG para determinar si El Nixticuil debe considerarse área protegida

Noviembre de 2005
• La Semarnat declara que El Nixticuil es un bosque nativo. Es un punto a favor de quienes se oponen a la construcción, pero no es un recurso formal


Publicado por PÚBLICO MILENIO / CIUDAD Y REGIÓN
Viernes 6-enero. .

Marcan árboles en El Nixcuitil “para tumbarse”

Vecinos del El Tigre II denuncian un nuevo intento por derribar parte del bosque para urbanizar la zona.

La disputa de los colonos de El Tigre II con la autoridad por defender el bosque El Nixticuil continúa. “El Ayuntamiento de Zapopan ya autorizó la construcción de un fraccionamiento en la parte más alta del bosque. Esto es importantísimo porque la misma Prodeur [Procuraduría de Desarrollo Urbano] está haciendo el señalamiento que no es correcto hacer esto, sin embargo, ellos no toman en cuenta todo esto, aún así se quieren meter con sus planchas de cemento. Nosotros no somos los únicos que estamos en desacuerdo para que se urbanice de esta manera tan drástica un bosque natural, hay otras instituciones; Semarnat ya dictaminó que es un bosque”, dice la voz desesperada de Adriana Hernández, del comité de colonos que busca salvar el bosque.

El asunto ahora es que hace como un mes, en la parte superior se empezaron a señalar árboles con una equis roja: “Son para tumbarse porque vino el ingeniero cuando la subdelegada de la Semarnat estaba haciendo el estudio de aquí del bosque y él mismo le dijo que era para derribarse. Además, el SIAPA [Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado] quiere hacer un tanque elevado, siendo que tienen la obligación de entregar un estudio de impacto ambiental independiente al del ayuntamiento y no lo han hecho”.

La estrategia es dejar una cortina de varios metros de árboles al borde de la carretera para que no se vea lo que están haciendo en el interior del bosque, agregan los vecinos.

El área verde de El Nixticuil, calculada en unas 200 hectáreas, es uno de los tres bosques que quedan en la zona metropolitana.

Adriana Hernández insiste que el plan de desarrollo que les mostraron sigue habiendo vialidades que cruzarán por en medio del bosque, dos grandes para ser específicos: “Siguen ellos creyendo que el desarrollo es sinónimo de destrucción de un bosque y están equivocados”. Asegura que todo se debe a intereses económicos de los constructores.

Jesús Palacios, miembro también del comité, indica que en la última junta que tuvieron con las autoridades se les informó que el tanque elevado era para las casas de Nextipac: “No nos han dicho siempre la verdad porque el fraccionamiento está autorizado sólo por el ayuntamiento, no por la Semarnat ni por la Profepa”.

Don José Vázquez es el velador de uno de los terrenos de la parte alta del bosque del Nixcuitil. El dueño se llama Francisco Ibarra, según informa el empleado. Don José dice que en una ocasión escuchó a su jefe decirle a los albañiles que ningún árbol debería de tumbarse, que si lo querían quitar tenían que sembrarlo en otra parte. Luego señala un lugar y dice que ahí va a ser la calle.

Sin embargo, recuerda también que en una ocasión llegaron dos patrullas, los oficiales le pusieron “una cinta de prohibición” al terreno para impedir cualquier obra, pero el dueño la rompió y “los mandó a la chingada”, y les dijo que si volvían a entrar al lugar los iba a matar. Los uniformados nunca han regresado.

Circulares

El comité de protección del bosque entregó a Público una circular del pasado 14 de diciembre, dirigida al hoy ex alcalde de Zapopan, Arturo Zamora Jiménez (quien pidió licencia el 15 de diciembre), en la que se le solicita que el bosque de El Nixcuitil sea declarado reserva natural protegida.

Además convocan para que se realice un foro público en febrero de 2006, en el que estén presentes las comisiones, dependencias municipales, los grupos que promueven el proyecto y académicos responsables del estudio del área protegida: “Con el tema único de discutir propuestas para la creación y manejo del área natural protegida El Nixcuitil-El Diente, y los planes parciales [de desarrollo]”, se lee en el papel. Añaden la petición de suspender las licencias de urbanización y edificación.

Por otra parte, se informó que a la colonia ya le aprobaron el drenaje, el cual entrará bordeando el bosque para descargar en la avenida Guadalajara. La inversión será de cuatro millones 700 mil pesos y entrará en el presupuesto del próximo año.

Publicado Grupo Milenio / 26-diciembre-05

Otro bosque en riesgo

A finales de mayo y principios de junio fueron talados cerca de 300 árboles en el bosque de Nixticuil, en su mayoría robles, para construir 260 pies de casa, con el objetivo de reubicar a los afectados de las grietas en Nextipac.

Desde hace más de dos meses los vecinos de la colonia el Tigre II pasan días y noches preocupados por la factible entrada de maquinaria para derribar más árboles del bosque de Nixticuil.

A la vez que temen una tala mayor, sufren desde hace dos décadas falta de servicios básicos y muchos de los terrenos de la zona no están regularizados.

La inconformidad es visible, luego de que a finales de mayo y principios de junio, el ayuntamiento de Zapopan realizara una tala de cerca de 300 árboles en dicho bosque, en su mayoría robles, para la construcción de 260 pies de casa, con el objetivo de reubicar a los afectados de las grietas en Nextipac.

De acuerdo a vecinos de la zona y especialistas de la Universidad de Guadalajara, para talar el bosque requerían una manifestación de cambio de uso del suelo y estudios de impacto ambiental, los que no efectuaron.

Ante esto y para detener lo que los habitantes llaman un “ecocidio”, interpusieron una demanda ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

La Ley general de equilibrio ecológico y protección al ambiente, así como la Ley forestal de desarrollo sustentable, establecen que para realizar alguna obra pública es necesaria una manifestación de impacto ambiental y de cambio de uso del suelo.

“Por esto las autoridades violan las leyes estatales y federales. No es posible que quieran hacer una obra sin antes ver la normatividad y cumplir con ésta”.

Además es un área establecida en el plan de desarrollo urbano, para su conservación, aseveró la investigadora del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA), Ofelia Pérez Peña.



Trabajos que causan daños al bosque

En fechas pasadas iniciaron la introducción de maquinaria pesada, grúas y equipo similar. En cuestión de horas “le dieron en la torre a muchos árboles del bosque” para el desarrollo de viviendas, comentó el colono Sergio Valencia.

“Trituraron ramas y lo que pudieron. Otras partes las tiraron. Muchas raíces quedaron y otras hasta se les caían, porque los camiones iban llenos.

“Nos dimos cuenta que las autoridades de Zapopan y el gobierno del estado actuaban de manera arbitraria”.

Los colonos, preocupados por las consecuencias ambientales, se opusieron a la realización de dicha obra en el área boscosa.

Los funcionarios del ayuntamiento les comentaron que trasladarían los árboles a otro lugar para su protección. Sin embargo, en una visita a la zona, pocos recibieron este trato.

Pérez Peña, licenciada en educación, maestra en medio ambiente y desarrollo integrado y doctora en ciencias ambientales y ciencias sociales, explicó que esta acción origina daños importantes, pues la mayoría de macizos fueron triturados y uno que otro trasplantado, pero por las malas técnicas en esta labor, se perderán.

La remoción de vegetación del arbolado afecta a estas “fábricas de oxígeno” y al hábitat de muchas especies. Con esas acciones habrá menos captación de agua, inundaciones y deslaves.

“El problema es que si continúan los proyectos, esto es, la construcción de 250 casas en el bosque, la llegada de alrededor de mil 500 personas (en el supuesto de que en cada casa hubiera cinco integrantes) impactará más a la zona”.



El Nixticuil, uno de los tres bosques nativos que quedan en Zapopan

De acuerdo a los especialistas y vecinos del Tigre II, con este proyecto serían afectadas un total de 5.2 hectáreas del bosque.

Sergio Valencia y Cristina Ávalos Núñez, también habitantes de esta colonia, dijeron que las autoridades pretenden construir más casas, entre otros desarrollos, así como un colector que pasaría por medio bosque.

“Es lamentable decirlo, pero pretenden introducir un colector al interior del bosque (…) Esta obra es una herida de muerte, pues una vez construida, llegarán más proyectos que impactarán a esta reserva natural”.

De hecho, los vecinos comentaron que el ayuntamiento está dando solicitudes para la compraventa de casas en el Tigre II, en el área donde fueron talados los árboles.

Ofelia Pérez Peña, académica del CUCBA, aseveró que pueden originar la pérdida de un bosque nativo y con arbolado natural, es decir, no inducido por el hombre.

Según investigaciones del CUCBA, esta zona forestal es uno de los tres bosques nativos que quedan en la exvilla maicera y el de mayor extensión (más de 169 hectáreas).



Colonos insisten en la búsqueda de alternativas para no afectar al bosque

Desde hace dos meses los habitantes del Tigre II han sostenido pláticas con secretarios y regidores del ayuntamiento de Zapopan, representantes de la Profepa, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Secretaría de Desarrollo Urbano, para exponer sus demandas. Sin embargo, han encontrado pocas o nulas respuestas

En entrevista con varios colonos (Sergio Valencia, Cristina Ávalos, Paula Ortiz y Alicia Flores), éstos expresaron que la mayoría de los habitantes están de acuerdo con proteger el bosque.

Afirman que deben encontrar alternativas a la reubicación de los vecinos de Nextipac, para no dañar más la zona.

“Si deben reubicarlos en la colonia, proponemos que utilicen lotes desocupados. Existen 100 terrenos de seis metros por 15, en donde caben las familias que quieran, sin necesidad de hacer un nuevo proyecto”, aseveró Sergio Valencia.

“Las autoridades manejan la cifra de 250 familias de Nextipac, pero hemos ido a investigar y hasta el momento son 24 las que quieren cambiarse”.

Con respecto al colector, planteó que deben buscar opciones ecotecnológicas para evitar más daños al bosque.

En la colonia el Tigre II, asentada en el bosque de Nixticuil, hay personas hasta con 20 años de residencia, quienes enfrentan una serie de problemas, como la falta de regulación de sus terrenos.

Según Cristina Ávalos, la inmobiliaria empezó a vender terrenos e hizo su fraccionamiento aquí. Después donó predios al ayuntamiento, porque había que pagarle a ese municipio. “De hecho, hay propietarios con papeles de compraventa del ayuntamiento”.

“Nos dicen que son terrenos irregulares y que no somos dueños, aunque tengamos nuestro contrato. El ayuntamiento quiere revenderles sus predios (...) Eso no se vale, porque nosotros le compramos a un propietario y le pagamos”.

Pero eso no es todo, también carecen de drenaje, por lo que deben arrojar sus residuos a la calle, con el riesgo de crear focos de infección, además de que falta empedrado o pavimento en las calles.

Aunque los vecinos tienen agua, no llega hasta sus casas, de manera que deben turnarse para llenar sus aljibes desde 18 tomas diferentes. Otro problema es el mal servicio de transporte.

“Imagínese cuando venga más gente. Será necesario construir otras escuelas y ofrecer mayor cantidad de servicios médicos. ¿Dónde pondrán todo eso? ¿Van a tumbar el bosque?”

De acuerdo con los entrevistados, las autoridades municipales les han planteado negociar la puesta de servicios en la colonia, a cambio de la aprobación del proyecto de construcción.

Sin embargo, los pobladores no están de acuerdo, puesto que este recurso “no es negociable. Ni siquiera nos pertenece. Pertenece al medio ambiente, a la comunidad, a las futuras generaciones”.

Esto ha generado división entre los habitantes, ya que existe el temor de que si no apoyan el proyecto, no tendrán servicios públicos.



Discuten propuestas

Según la académica, existen muchos intereses en el bosque, pero no para conservarlo. El mayor problema es que no ha habido respuestas adecuadas de las autoridades. De hecho, “falta apoyo. Existe poca voluntad política para resolver esta situación y mucha imposición para hacer el proyecto a costa de lo que sea. En este sentido, tampoco muestran interés en su modificación”.

A pesar de todo, Pérez Peña asegura que de las pláticas sostenidas con algunos regidores del ayuntamiento de Zapopan han salido algunos avances, ya que en este momento discuten tres propuestas.

“Una plantea llevar a cabo las obras y dejar el resto como parque municipal. Otra, elaborada por la regidora del Partido Verde Ecologista, establece proteger 60 hectáreas del bosque, y la tercera opción, emanada del Partido Acción Nacional, consiste en resguardar las 169 hectáreas”.

Sin embargo, habitantes de la zona han planteado a la senadora Verónica Velasco una propuesta para establecer como área natural al bosque de Nixticuil, mientras que solicitaron al CUCBA realizar estudios para esto, así como investigaciones acerca de la flora y fauna.

Desde el punto de vista técnico y científico, Ofelia Pérez Peña comentó que es necesario tomar medidas para evitar la destrucción de esta zona natural.

La egresada de la carrera de biología, del CUCBA, Paloma Gallegos, explicó que el bosque tiene muchos atributos, por lo que debe ser protegido.

“En un breve recorrido observé muchos árboles jóvenes. Es un pulmón importante para la zona metropolitana. Además tiene una diversidad considerable de plantas y cuenta con ojos de agua, un arroyo de temporal y muchas cosas por descubrir”.



Bosque de Nixticuil

Ubicación: carretera a Tesistán y avenida prolongación Ángel Leaño.

Extensión: 169.28 hectáreas.

Importancia: es uno de los tres bosques nativos que quedan en Zapopan.

Principales árboles: pino-encino y diversas especies endémicas.

El área es un lugar interesante para la avifauna. Hasta la fecha tienen registradas 82 especies de aves.



Eduardo Carrillo ecarrillo@redudg.udg.mx

FUENTE: UdeG.

Primeros acuerdos en El Tigre II

A cambio del apoyo de los vecinos del fraccionamiento para regular sus terrenos y urbanizar la zona, el Ayuntamiento de Zapopan.

El ayuntamiento de Zapopan y los colonos del fraccionamiento El Tigre II dieron el primer paso en un largo camino de acuerdos para urbanizar la zona sin dañar el bosque de El Nixticuil. Este domingo, ambas partes pactaron que habrá servicios básicos para la colonia, que el bosque será declarado Parque Municipal Protegido y que un comité de vecinos vigilará que los futuros planes de urbanización en la zona se hagan de acuerdo al Plan de Manejo de Área Protegida.

Estos resolutivos se obtuvieron al final de una larga asamblea de colonos en la que las diferencias de criterios entre grupos de vecinos hicieron ríspido el trabajo. Unos decían que a la asamblea podían entrar otros grupos implicados en el problema, como los vecinos de Nextipac que serán reubicados en la zona; otros decían que el problema sólo incumbía a los colonos de El Tigre II.

Pero las diferencias básicas estaban entre dos grupos, que en su momento tomaron el micrófono. Unos decían: “Todos tenemos las fosas [sépticas] hasta el tope. Primero que nos den la obra, luego lo demás [el bosque]”; “Hay que negociar. Pueden pasar 30 años y no se hace nada”. Otro grupo difería: “Todos queremos servicios, pero sin condiciones. Es obligación del gobierno, todos pagamos impuestos”; “Hay que proteger el bosque”.

El director general de Asesoría de Zapopan, José Luis Cuellar, hizo la oferta del ayuntamiento, leyendo un documento en el que cambiaba la palabra “acuerdo” por “pliego de peticiones”. Mañas de negociador. El ayuntamiento proponía a los vecinos construir una red de drenaje, agua potable, banquetas y calles empedradas a cargo del presupuesto municipal. A cambio, los colonos se comprometían a hacer los trámites de regularización de sus tierras. Además, prometía declarar área natural protegida, bajo la modalidad de parque municipal, 35 hectáreas de bosque, y vigilar que las constructoras que hagan las obra de urbanización trasplanten, poden y reforesten los árboles.

Los vecinos respondieron que estaban de acuerdo con la propuesta, pero pidieron detalles concretos. ¿Drenaje conectado a la red del SIAPA o planta de tratamiento de aguas? ¿Cuál será el “precio símbólico” que pagarán los colonos por regularizar sus propiedades? ¿Cuáles 35 hectáreas serán el área protegida? ¿En qué condiciones se va a hacer el Plan de Manejo del Área Protegida? ¿Cuándo inician las obras?

Esto abrió otros puntos polémicos: la reubicación de los vecinos de Nextipac a un predio contiguo y la construcción de un asilo para ancianos en la zona. Uriel Álvarez, representante de los ejidatarios de Nextipac, dijo tajante: “Nadie ha aceptado la reubicación”. Cuéllar respondió que nadie será reubicado a la fuerza y comentó que no tiene caso hacer los pies de casa para ellos si nadie va a moverse.

Sobre la construcción del asilo de la congregación coreana de los Hermanos de Cristo, dijo que aún no es seguro que se haga, a pesar de que el cardenal Juan Sandoval Iñiguez bendecirá los terrenos mañana. “El proyecto estará sujeto al plan de manejo de área protegida”, prometió.

Una comisión de cinco vecinos dará seguimiento a los primeros acuerdos. En la concreción de las promesas se juega el largo camino de negociación. Al final, uno de los vecinos le dijo al otro grupo: “Si no hubiéramos presionado por el bosque, no nos hubieran ofrecido nada”, Cuellar le dio la razón: “El gobierno hizo mal en no venir antes a dialogar con ustedes”.

Publicado por Grupo MILENIO/Septiembre 12, 2005 /José Miguel Tomasena, Guadalajara

Existencia del bosque El Nixticuil, amenazada por nuevas obras

Vecinos aseguran que se les invitó a comprar casas en la zona forestal; además se erigirá un convento.

Las autoridades dicen que no, pero las evidencias en la colonia El Tigre II, en Zapopan, apuntan a que los vecinos perderán poco a poco las hectáreas del bosque de El Nixticuil. El jardín de niños cercano a la zona boscosa cerró sus puertas y se cambió a una de las calles del lugar, los vecinos de la parte baja han recibido la invitación para adquirir alguna de las casas que se construirán dentro del área ecológica, y es información conocida que el bosque albergará un convento de monjas coreanas.

Sin embargo, las autoridades del Ayuntamiento de Zapopan se deslindan de la responsabilidad y aseguran que se trata de una obra de los gobiernos estatal y federal, refiriéndose al trabajo interrumpido de la edificación de pies de casa para los afectados por las grietas en Nextipac.

Sobre el convento coreano, el director de Obras Públicas en Zapopan, Ignacio Vázquez, señaló que es un inmueble que se pretende construir en una esquina del bosque, y dijo ignorar qué en el lugar se pretenda edificar 1,500 pies de casa, aunque los vecinos aseguran que el programa municipal Comunidad Digna se los ha ofrecido.

Desde hace varios meses, el bosque El Nixticuil, enclavado en la colonia irregular de El Tigre II y la zona de Los Robles, ha sufrido la agresión de parte de las autoridades estatales y municipales. El 5 de junio pasado, Día Mundial del Medio Ambiente, la constructora contratada por la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedeur) taló 250 árboles de la zona. Después entró la Dirección de Parques y Jardines de Zapopan y también podó varios. Al final, el número de árboles podados fue de 360.

Poco después, el director de Ecología en el municipio, Carlos Javier de Alba Góngora, reconoció que la mitad de los árboles, por lo menos, no resistiría el traslado a otro lugar. Murieron. Ante la inconformidad vecinal, las obras en el ingreso del bosque, en la parte baja de la colonia El Tigre II, están suspendidas.

En nombre de nextipac

Zapopan autorizó la edificación de pies de casa en El Tigre II, bajo el argumento de la urgencia que significaba que los habitantes de Nextipac dejaran sus viviendas antes del presente temporal. Los colonos de Nextipac se rehusaron al cambio porque la oferta no era tentadora: el ayuntamiento no les pagaría el costo real de sus viviendas y ellos tendrían que continuar con el pago de las casas en El Tigre II. Por ello, los colonos afectados por las grietas prefirieron continuar en Nextipac y rellenaron los huecos abiertos en junio del año pasado con escombro.

Aun así, el municipio y la Sedeur continuaban con las obras. Ya detenida la construcción, la Dirección de Desarrollo Social en Zapopan anunció que el recurso del gobierno federal para las casas se perdería por no usarse con prontitud.

La Sedeur no ha regresado para continuar con las obras en el área, donde de bosque no quedaron más que troncos muertos. Pero la ausencia del jardín de niños, la promoción de viviendas y la inminente construcción de un convento anuncian que las agresiones contra el bosque continuarán.

Publicado por el Grupo MILENIO/Septiembre 8, 2005 / Dolores Reséndiz Mora

A LOS COLECTIVOS Y ORGANIZACIONES DEL ESTADO DE JALISCO

El bosque del Nixticuil, cercado por nuevas colonias sin planeacion, para todo ese corredor industrial, para esos grandes empresarios. Hoy es amenazado, el pretexto y la mentira: construir “250 pies de casa” para nuestros hermanos habitantes de Nextipac, que tras el surgimiento de las grietas fueron desalojados de su vivienda. El gobierno de Zapopan, les prometió ayuda, una ayuda que por cierto es su OBLIGACION, a esto se sumaron 40 millones de pesos de presupuesto federal, para el auxilio a gente damnificada por DESASTRE NATURAL. La respuesta, fue el proyecto de la construcción de los pies de casa, y en donde creen? Si, acertaron!, encima de las 160 hectáreas de roble nativo de nuestro bosque del Nixticuil, en donde no construirán 250 casas, sino 1600 y un colector de agua. Así una noche llegaron con su gran maquinaria, la luz eléctrica fue cortada, y la devastación comenzó, talaron 60 árboles y al momento de caer cada uno era convertido en aserrín por trituradoras. Por q cortar la luz?, por q comenzar a trabajar a mitad de la noche?, por que borrar toda clase de huella, de rastro de que algún día existió allí una parte de un gran bosque?. Ningún árbol sin raíz tiene la posibilidad de sobrevivir, de ser transplantado, o reubicado y menos si el árbol ahora solo es polvo de aserrín.

Pero como siempre existe gente, que se opone a que la aplasten, a que le quiten algo de propiedad universal: bosque y oxigeno, gente que paro la obra en ese mismo momento. Así es gente!, a las llamadas autoridades que por esta vez encuentran su representación en el PRI y en el presidente municipal Arturo Zamora, les gusta destruir y desaparecer bosques, y por consiguiente también matar poco a poco a los habitantes de la CIUDAD ZAPOPAN, al quitarles una gran parte de su oxigeno. Y cual fue su respuesta? Actuar como siempre lo han echo: compraron al presidente de Colonos, ofrecen poner precio a nuestro silencio, amenazan, realizan propuestas falsas como la de meter los servicios básicos, que son su OBLIGACION y que después de tantas décadas de condenar al Tigre II a vivir en la marginalidad, por alguna razón hoy están dispuestos a poner, claro a cambio de la destrucción de un bosque. Este no es un proyecto realmente dirigido a la gente afectada por las grietas de Nextipac, lo que tratan de cubrir es que es un proyecto para al menos 1600 casas, que aunque ni siquiera se están haciendo ahora mismo se están vendiendo y a gente que no tiene nada que ver con Nextipac. Entonces, si el presupuesto federal era para ser invertido a la ayuda por desastre natural y no esta siendo de esta forma; el no muy Honorable Ayuntamiento de Zapopan esta incurriendo en una situación penada por la ley, en un acto conocido como DESVIACION DE FONDOS. Obviamente los 40 millones de presupuesto federal no los quieren devolver, alguien será beneficiado con este negocio, lucrando con los pobres como siempre, pero quien? Las constructoras? Arturo Zamora y la mafia priista de Jalisco? O puede ser que todos ellos? Esa clase parásita y explotadora que no dejara ir 200 millones de pesos, que obtendrán por los 160 mil pesos en los que cada casa será vendida.

El bosque del Nixticuil es fuente inagotable de muchos recursos: el oxígeno del aire, de suelo fértil, lugar de especies de plantas endémicas, cause natural de las aguas que corren todavía por Río Blanco, los diques con árboles contienen mejor las aguas de inundación que aquellos deforestados. Y cual es la respuesta del gobierno, de los representantes elegidos “democráticamente”: intentar sustituirlo por cemento. Y las autoridades responsables? En su oficina tomando café y planeando su destape y su campaña para convertirse en gobernador. Si la tala destruye los árboles de una empinada ladera, como es el caso del Nixticuil, la descomposición de las raíces que afianza la tierra puede incrementar mucho el riesgo de deslaves. Osea que las 1600 casitas que pretenden edificar, ponen en riesgo a las familias que las compren.

Jalisco tiene una historia negra en cuanto a talas injustificadas aprobadas por el Departamento de Parques y Jardines, casos memorables como: los 140 árboles arrasados por la transnacional Walmart (allá por Circunvalación y Belisario Domínguez), o el millón de pesos invertido para establecer el control biológico de la conchuela; que no tiene comparación con lo gastado por Cornelio, en Zapopan, en palmeras traídas del Estado de Guerrero a ver si se daban en la Av. Patria? ¡Mucho más! ¿Por qué tan poca inversión en el salvamento de árboles que han tardado décadas en desarrollarse?

Los bosques mexicanos tienen la tercera mayor extensión de América Latina, con 34 millones de hectáreas, casi la quinta parte del territorio nacional. Según el Banco Mundial, en México se da la mayor deforestación del subcontinente. Cada día se pierde, por la tala y los incendios, una riqueza forestal equivalente a 2.5 veces el tamaño del bosque de Chapultepec; con los programas de reforestación, sólo se recupera el 15 por ciento. La realidad es que actualmente México se encuentra en el quinto lugar en cuanto a depredación forestal.

Lo que aquí se está produciendo es un auténtico ecocidio. A los colonos nos ha quedado muy claro que constructores y autoridades municipales de Zapopan han diseñado una red de complicidad donde lo importante es el dinero, las grandes ganancias que obtendrán con este negocio. Eso de que los funcionarios de Zapopan sostengan que es inevitable la devastación del bosque en cuestión, y de que el problema se soluciona tumbando un bosque para pensar en sembrar otros diez, es, sencillamente, inadmisible. Nos quieren ver la cara? Los que talaron fueron árboles con 40 años y lo que harán es reponerlos con un montón de arbolitos", A ver cuándo crecen y si los riega alguien. Esta lógica del poder, es la que tiene a los ecosistemas del país abatidos: lagos a punto de extinguirse, ríos muertos, ciudades devastadas por la polución, bosques arrasados, una lista interminable...

Publicado por : Roberto Hipolito Hernandez el 2 sep 2005-09-17 en
http://lists.indymedia.org/pipermail/imc-mexico/2005-September/0902-1w.html

250 robles en El Tigre II morirán

Los árboles no sobrevivirán su trasplante, reconoció el ayuntamiento.

El director de Ecología de Zapopan, Carlos Javier de Alba Góngora, reconoció que alrededor de 250 robles que se retirarán del bosque de Nixticuil en el fraccionamiento Tigre II, no sobrevivirán al traslado a otro lugar. El encargado de la supervisión ambiental en el municipio dijo que más de la mitad de los 398 árboles que tienen que ser trasplantados en otro lugar para dar paso a la construcción de viviendas, no tienen posibilidades de continuar con vida en un suelo nuevo.

El Ayuntamiento de Zapopan entregó cinco hectáreas de la colonia El Tigre II para que el gobierno del estado construya los pies de casa donde vivirán los colonos de Nextipac afectados por la grietas que se abrieron en ese lugar. Sin embargo, dicho terreno forma parte del bosque de Nixticuil y sólo en esa parte existen 398 árboles, de acuerdo con el inventario de la Dirección de Ecología de Zapopan.

También con datos del municipio, se sabe que 32 de esos robles ya no existen: 20 fueron talados por la constructora, sin dejar posibilidad de que sean trasplantados, y doce ya estaban muertos.

El funcionario únicamente reconoce que “no es correcto” permitir la muerte de árboles; aunque en un intento por minimizar el hecho, presume que el programa de reforestación municipal durante este año contempla la plantación de 400 mil ejemplares.

Además, añade que el bosque de Nixticuil se compone de 34 hectáreas, por lo que quitarle cinco de ellas no es tan grave. “Es un pequeño porcentaje del bosque que traerá impactos favorables a la población”, indicó De Alba Góngora al referirse a la construcción de viviendas para los habitantes de Nextipac.

Actualmente, las obras están suspendidas ante la voz vecinal en contra del retiro de árboles. La Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) abrió un expediente después de la denuncia, también vecinal, de la tala de árboles de parte de la constructora.

La Dirección de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Zapopan sancionó a la compañía constructora. ¿Su castigo? Plantar diez árboles por cada roble que podó sin conocimiento y sin recibir autorización del municipio.

En el lugar trabajaron dos constructoras: la encargada de la urbanización se llama Calario y la empresa asignada para la edificación de los pies de casa es Terram. Ambas fueron contratadas por la Secretaría de Desarrollo Urbano, aunque actualmente ninguna trabaja y no hay una fecha para reanudar las obras.

Publicado por Grupo MILENIO/Julio 14, 2005 / Dolores Reséndiz Mora

Matan un bosque con la anuencia de autoridades

Con el pretexto de construir casas para los afectados por las grietas en Nextipac arrasan con pinos y robles de El Tigre II.

La construcción de viviendas está acabando con cientos de árboles, un extenso bosque de pinos y robles. Es Zapopan, en la colonia El Tigre II, donde los árboles están desapareciendo ante la mirada complaciente de las autoridades municipales y estatales y sólo un grupo de voces en contra: algunos vecinos.

El Tigre II es la colonia que el Ayuntamiento de Zapopan dispuso para que vivan los habitantes de Nextipac, los que tienen que dejar sus casas ante el riesgo de que aparezcan nuevas grietas. Para la autoridad municipal, el terreno ubicado atrás del hospital Ángel Leaño, cercano a la avenida Tesistán, es el lugar idóneo para que viva la población de Nextipac.

Sin embargo, el terreno elegido por el ayuntamiento es un bosque, en el que robles y pinos conviven y ofrecen a la población del lugar calidad en el aire y hasta un aroma diferente. El olor de las especies comienza a desaparecer: los árboles están muriendo, el terreno de construcción avanza.

La constructora encargada de la adecuación al terreno en la zona tumbó árboles sin autorización del municipio. De acuerdo con la Dirección de Parques y Jardines, fueron alrededor de 60 especies las que podó la empresa de construcción sin el método correcto y provocó su muerte. Esto les provocó una sanción: la constructora está obligada a sembrar árboles. ¿Dónde? ¿De qué especie? ¿Cómo? Nadie lo sabe, no existe un área que supervise el cumplimiento del castigo.

Sin embargo, los vecinos del lugar aseguran que casi fueron mil especies las que desaparecieron, y de las cuales la constructora se encargó de no dejar huella.

“Los cortaban en la madrugada y la policía los cuidaba de que nadie los viera. Después trituraban la madera, para no dejar la evidencia del tronco cortado y se lo llevaban. Así ya llevan mucho tiempo”, explicó don Jorge, vecino del lugar. Mientras ocurre la entrevista, una patrulla de la Policía de Zapopan observa de cerca el trabajo del fotógrafo y no se aleja del lugar.

Hace quince días, los colonos del lugar suspendieron la construcción que llevaba a cabo la empresa, atribuyendo la falta de información y la celeridad en la poda de árboles sin el cuidado para trasplantarlos en otro lugar.

La autoridad de Parques y Jardines en Zapopan informó que cada uno de los árboles extraídos del suelo de El Tigre II sería trasplantado.

Sin embargo, en la zona no se observa ningún árbol recién plantado. La imagen sólo es de árboles mal cortados, especies sin ramas y robles tirados en el suelo secándose. En el lugar es obvio que ninguna autoridad forestal lo ha visitado, y si lo ha hecho, no ha sido público y ni los vecinos del lugar se han dado cuenta.

Hoy, los vecinos de El Tigre II recibirán en su colonia a las autoridades del municipio y representantes del Partido Verde Ecologista en Zapopan. Ellos creen que el ayuntamiento insistirá en el mismo tema: “Nos van a condicionar la introducción de servicios, a cambio de que dejemos trabajar a la constructora”, apuntó Roberto, otro de los colonos del lugar.

Existe desinformación. Además de las viviendas que se construirán para los habitantes de Nextipac (quienes no han aceptado irse a El Tigre II), en la zona también se pretende la instalación de un coto privado. Por ello, la extensión del predio se alarga constantemente y con esto, la muerte de los árboles.

El consenso ya es general: los habitantes de El Tigre II quieren servicios públicos, pero no a cambio de la muerte del bosque con el que conviven, pero que están viendo morir.

Publicado en : Grupo MILENIO/Julio 9, 2005 por Dolores Reséndiz Mora

febrero 17, 2006

Rechazan poda de árboles en El Tigre II

Vecinos se oponen a la remoción de 380 ejemplares en el terreno en que se construirán casas para habitantes de Nextipac.

A la colonia El Tigre II, en Zapopan, regresaron los desacuerdos vecinales, después de que una parte del terreno se destinó para la instalación de viviendas para los habitantes de Nextipac, lugar afectado por las grietas durante el temporal del año pasado. En el área, se removerán alrededor de 380 árboles, la mayoría robles, aunque el municipio promete el trasplante de éstos hacia una zona aledaña.

Los vecinos de El Tigre no están de acuerdo. Algunos se oponen únicamente a la poda de árboles; otros, además de estar en contra del retiro de las especies, rechazan la construcción de casas y la posterior llegada de vecinos.

Ayer, autoridades del Ayuntamiento de Zapopan atendieron a los vecinos inconformes, pero el único acuerdo fue que la constructora continuará con la edificación de los pies de casa y las viviendas serán destinadas para los habitantes de Nextipac.

Aun así, su presencia tuvo eco entre la autoridad y, después de dos horas de reunión, vecinos y representantes del municipio se fueron a la colonia para supervisar la poda de árboles.

El director de Parques y Jardines en el municipio, Ramón Reyes García, les aseguró que la poda de árboles garantizaba su posterior plantación en un área cercana. Los vecinos no le creyeron y reclamaron que la constructora había cortado las especies sin sacarlas con todo y raíz.

“Estamos esperando que el trasplante sea arriba de 60 por ciento la expectativa de vida. Estuvimos en el terreno, junto con la constructora, plano en mano, para ver por dónde iban a pasar vialidades, y con base a eso Parques y Jardines tomó la decisión de podar árboles. Precisamente entramos a cortarlos para hacer un trabajo de buena calidad”, apuntó Reyes García.

La regidora del PVEM y titular de la Comisión de Ecología en Zapopan, Maricarmen Acosta, también acompañó la visita. Ambos funcionarios realizaron el trabajo de campo y los resultados los dará a conocer hoy el director de Ecología en el municipio, Carlos Javier de Alba Góngora.

“La constructora se adelantó y provocó quejas de los vecinos. El viernes pasado fue la primera llamada de alerta y se convocó a una reunión e insistiremos en eso. Mañana [hoy] ya habrá un levantamiento de los peritos de Parques y Jardines y, si la constructora actuó mal, sí habrá sanción”, subrayó De Alba Góngora.

Publicado por el Grupo MILENIO/Junio 7, 2005

Problemática

Para que te des una idea de la problemática y tomes tu propio juicio te resumimos los acontecimientos hasta la fecha.

- A principios del 2004 se le solicita al ayuntamiento convierta 30 hectáreas de bosque en parque público para reforzar su protección.
- Durante el temporal de lluvias (2004) se abre una zanja en Nextipac afectando a varios ciudadanos.
- El Ayuntamiento de Zapopan inicia esfuerzos para reubicarlos
- En mayo del 2005 se informa la intención de reubicarlos en el tigre II y se inician obras.
- Los vecinos del tigre II protestan por la depredación del bosque y los habitantes de Nextipac notifican que no desalojaran sus propiedades, no les interesa trasladarse al Tigre II.
- Se suspenden obras y se inicia negociaciones con el Ayuntamiento de Zapopan.
- En plena negociación y de forma sorpresiva se informa que el Ayuntamiento dono mas terreno para la construcción de un asilo.
- Se firman acuerdos Express en el Ayuntamiento de Zapopan
- El Cardenal de Guadalajara bendice los terrenos con la intención de iniciar la obra.
- Los vecinos del Tigre II protestan por este nuevo desarrollo que afectará al bosque.
- Senadores concientes de la problemática ambiental solicitan se detenga el proyecto ante el Senado de la República
- En reuniones con funcionarios del Ayuntamiento de Zapopan y por investigaciones periodisticas se conoce a fondo las intenciones del Ayuntamiento.

Vecinos de El Tigre II se unen para defender su bosque

El Ayuntamiento de Zapopan derribó por lo menos 300 árboles para urbanizar el área. Los vecinos acusan a las autoridades de delitos ambientales por el ecocidio.

Los vecinos de la colonia El Tigre II están indignados. Por su cabeza pasan tanto sospechas de corrupción y negligencia como ideas para impedir a cualquier costo que el Ayuntamiento de Zapopan continúe con la deforestación del bosque que lleva el mismo nombre.

Ayer tuvieron su asamblea vecinal a unos metros del lugar donde todavía hace mes y medio había, según sus cálculos, por lo menos tres centenares de viejos árboles que las autoridades municipal y estatal derribaron para urbanizar.



Entre sus manos tenían volantes de denuncia, súplica y amenaza: “Queremos bosques urbanos en Zapopan. Únete a la defensa del bosque de El Tigre II”, es una de las frases impresas junto con argumentos legales que tienen para defender la zona.

Quieren castigo, explicaciones y reparación del daño, aunque es irreversible. Ya consiguieron parar el derribo de más especies, pero todavía no la garantía de que será respetado como una de las pocas zonas boscosas que quedan en la ciudad, y que puede ser rescatada por ser propiedad municipal y no privada.

El 18 de mayo pasado, el Ayuntamiento de Zapopan, que preside Arturo Zamora Jiménez, comenzó la deforestación de El Tigre II porque pretende reubicar ahí a las familias de Nextipac, zona donde en julio de 2004 apareció una grieta en el suelo de 1.7 kilómetros de largo que se tragó a dos vacas y un bombero.

Los colonos de El Tigre II comprenden que las 140 familias perjudicadas en Nextipac requieren un terreno para sus nuevas casas, pero no el por qué en una zona boscosa, sin consenso y sin estudio de impacto ambiental.

Hay más incongruencias que detectan en las acciones de las autoridades municipales y del gobierno del estado, que participa con recursos para la obra y con el trabajo de la Secretaría de Desarrollo Urbano.

¿Si fueron 140 las familias desalojadas de Nextipac, por qué la intención es hacer más de 250 viviendas?, ¿por qué si la colonia El Tigre II ni siquiera ha sido regularizada por el ayuntamiento ni cubierta en todos los servicios públicos, quieren meter por lo menos mil personas más?

¿Por qué quieren construir un colector que beneficiaría al punto más residencial de la zona?, ¿por qué llega gente a preguntarles frecuentemente en dónde será construido un fraccionamiento residencial?

Las sospechas son muchas, las pruebas pocas. Algunos piensan que la verdadera intención es no sólo urbanizar cinco hectáreas, sino muchas más que resultarían un jugoso negocio para “alguien”. Otros, que ya está apalabrado el beneficio para Miguel Aldana, propietario de más de cien hectáreas de posible desarrollo residencial.

Se organizan

Los vecinos hicieron el 9 de junio pasado una manifestación en la carretera a Tesistán con la que consiguieron detener por unos días la obra, pero creen que necesitarán más acciones de resistencia.

Fueron alrededor de cien los que discutieron ayer y trataron de llegar a acuerdos con una de las líderes vecinales, Balbina Martínez, a quien acusaron de autorizar, junto con su esposo, Francisco Javier Mota, la construcción de las viviendas. Martínez lo negó y pidió pruebas.

La división en la mesa directiva fue evidente y también la posibilidad de que en las próximas asambleas haya cambio de presidente de colonos.

En los volantes aseguran que los funcionarios que aprobaron la urbanización violaron el Código Penal Federal, entre otras leyes ambientales.

Harán calcomanías para difundir la defensa del bosque y esperan que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, ambas federales, atiendan las denuncias que ya pusieron en contra del Ayuntamiento de Zapopan.

“No nos vamos a dejar, vamos a ser todo por vía legal y pacífica para defendernos”, afirmó Sergio Valencia Vega, vecino de El Tigre II.

Un paisaje incompleto

La postal está incompleta. El bosque de El Tigre tiene una mancha café, casi plana y con rastros de una dolorosa deforestación. Hay pedazos muertos de naturaleza que no se pudieron ocultar en medio de cientos de hectáreas boscosas que integran un paisaje difícil de ver dentro de la zona metropolitana.

Es un cementerio de enormes raíces de encinos, de algunos intentos de árboles trasplantados que ya terminaron en el suelo, pelones y sin posibilidad de revivir.

Un grupo de 50 niños, adolescentes y adultos, fueron a la sección de El Tigre II a tratar de empezar con la recuperación forestal. Encabezados por Luis Humberto Campos Tamayo, secretario estatal de Ecología y Medio Ambiente del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), recogieron llantas, bolsas de plástico y cualquier basura que encontraron para poder plantar cerca de cien arbolitos que compraron los vecinos.

Las acciones del PVEM no quedarán ahí, dijo Campos Tamayo, llegarán hasta el Ministerio Público, la Profepa y la Semarnat, para buscar castigo penal y administrativo para los directores zapopanos de Ecología, Carlos de Alba Góngora, y de Parques y Jardines, Ramón Reyes García, quienes habrían autorizado la tala y “trasplante” de los árboles. Hoy o mañana comenzarán con las acciones legales en su contra.

Publicado por Alicia Calderón-Grupo MILENIO/Julio 4, 2005

Ha perdido 100 hectáreas. Reduce su extensión el Bosque El Nixticuil por la falta de cuidado

Ha perdido 100 hectáreas. Reduce su extensión el Bosque El Nixticuil por la falta de cuidado

--------------------------------------------------------------------------------

Por la falta de apoyo y cuidado el Bosque El Nixticuil ubicado en Zapopan ha perdido alrededor de 100 hectáreas y le restan sólo 200. Las causas principales han sido los incendios, la tala y el crecimiento acelerado de las colonias aledañas al lugar.

También es frecuente el pastoreo y la presencia de ladrilleras, además de una erosión que con tiempo está aumentando, señaló el coordinador de la mesa de trabajo del bosque, Enrique Valdés Gómez, al mencionar la existencia de por lo menos 105 especies aves, animales e insectos. Aún hay coyotes, zorras tlacuaches y conejos.

La intención es proteger lo que aún queda, dijo, a través de reforestaciones y un cuidado especial con la colaboración de las autoridades municipales que en su momento se preocuparon más por los bosques La Primavera y El Centinela.

El día de ayer se celebró el Día Mundial del Medio Ambiente en El Nixticuil con la presencia de autoridades municipales encabezadas por el presidente municipal, José Ramírez Acuña. En el acto se mencionó la plantación de 10 mil árboles con la ayuda de jóvenes universitarios de la Universidad de Guadalajara.

El alcalde manifestó su interés por apoyar la protección del bosque y se comprometió a proporcionar todos los recursos que estén al alcance de la administración, además de recalcar la importancia de los estudios efectuados al lugar.

Por su parte, el rector del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, Salvador Mena Munguía, reafirmó su apoyo al ayuntamiento y se comprometió a que conjuntamente con los alumnos reforestar las zonas arboladas. Agregó que la campaña de reforestación puede crecer y ser una de las alternativas más productivas.

A su vez, el director de Ecología Municipal, Rubén Nuñez Gómez, informó que la dependencia a su cargo se preocupa por mejorar la calidad de vida de los zapopanos, y señaló que todas las acciones que se realicen para rescatar el arbolado será en bienestar de las futuras generaciones.


--------------------------------------------------------------------------------
Publicado en el El Informador de Guadalajara el 3 de junio del 2000

febrero 16, 2006

Como parte de una sociedad conciente de la importancia que tienen los bosques dentro de un ecosistema y en el propio bienestar de los seres humano, nos sumamos a la demanda civil que exige al Ayuntamiento de Zapopan, Jalisco, México.

- NO A LA DEPREDACION DEL BOSQUE DEL TIGRE II (Bosque el Nixticuil)
- NO A LA ORIZACION DE OBRA PUBLICA O CIVIL QUE LO AFECTE
- SI A LA PROTECCION INTEGRAL DEL BOSQUE EL TIGRE II (Bosque el Nixticuil)